lunes, octubre 16, 2006

006. OTRAS MUERTES, OTROS MUERTOS

No descarto el dolor de las desapariciones de los años oscuros. No pongo en tela de juicio los reclamos de quienes fueron silenciados, perseguidos, buscados, censurados, apresados, torturados, muertos, desaparecidos, olvidados, sepultados en los años del horror. No cuestiono el sufrimiento, la rabia, los reclamos, las demandas de quienes quedaron en algún lugar esperando un regreso, un llamado, una señal, el ejercicio de la paternidad o de la maternidad, al hijo ausente, al hermano definitivamente ido...
Pero quiero reclamar hoy por estos 30 años de otras "desapariciones" de las que fuimos víctimas: por miedo, por prudencia, por estrategias, por decisión nos fuimos separando de muchos amigos, compañeros, hermanos a quienes dejamos de ver, de llamar, de escuchar. Pasaron los años, se fueron los años oscuros, volvió la luz, reorganizamos la vida... pero anestesiados, insensibles, calgados de olvidos y desprovistos de memoria no reincoporamos a esos otros muertos que viven en otros lugares sus propias vidas... ni ellos nos reincoporaron: cada uno paga en secretos culpas indescifrables, innecesarias.
Tal vez, en cada uno de nosotros sobrevuele una sensación de responsabilidad por esta supervivencia, por lo que somos y seguimos siendo, por esta vida que tenemos.
¿Y si alguna vez hacemos justicia con nosotros mismos y recuperamos los nombres, las caras, los afectos, los abrazos, las palabras de los que poblaban nuestras vidas en aquellos tiempos? ¿O es que tenemos miedo de encontrarlos? ¿O es que no tendremos nada que decirnos? ¿ O es demasiado breve la vida para poder recuperar el tiempo definitivamente perdido?