“En términos de aptitud para las matemáticas RAMANUJAN era el cenit absoluto; estaba hecho de la misma madera que Arquímedes, Newton y Gauss, y hasta es posible que los superara. Sin embargo, en términos prácticos la falta de instrucción matemática formal durante sus años de formación lo había condenado a aprovechar únicamente una mínima fracción de su potencial.(…) Uno no podía por menos de preguntarse qué alturas habría conseguido alcanzar si la extrema pobreza en que había nacido no lo hubiera privado de la educación que recibía cualquier estudiante occidental bien alimentado” (DOXIADIS: EL TIO PETROS Y LA CONJETURA DE GOLBACH. 2006: 58)
Es curioso observar como a las APTITUDES PERSONALES – que tienen un mayor desarrollo si hay una buena alimentación y cuidado en los primeros años - se le debe sumar los conocimientos instrumentales y formales que acompañan ese crecimiento.
Para iniciarse en matemáticas, filosofia, literatura, arte, ciencias… no basta la predisposición o la inclinación o la vocación o el interés… sino que se necesitan también el desarrollo de las condiciones psicofísicas iniciales, y la incorporación de los conocimientos previos de cada una de las áreas del saber para no volver a descubrir lo que ya se ha descubierto, para no perder el tiempo con procedimientos que no conducen a ninguna parte, para no ignorar la manera de recorrer el camino de una forma productiva y eficiente.
No todo puede ser intuición, interés, creación: se necesita conocimientos, manejo de los procedimientos, reconocimiento de los que han estado antes que uno. No se trata de repetirlos, de venerarlos tanto que finalmente no nos atrevemos a nada… pero sí se respetar sus aportes para poder continuar el camino. En todas las producciones somos eslabones de una cadena que no comienza con nosotros ni terminará con nosotros: si no lo reconocemos nos exponemos a inventar, diseñar, construir, sostener la cadena… con la posibilidad de que esa cadena tenga un solo eslabón y desaparezca con nosotros…
“Antes de que puedas embarcarte en una investigación original productiva necesitas adquirir un arsenal poderoso. Tendrás que dominar a la perfección todas las herramientas matemáticas del análisis, el análisis complejo, la topología y el álgebra. Incluso un joven con las prodigiosas aptitudes como Petros necesitaba tiempo y dedicación absoluta para adquirir la maestría” (DOXIADIS, 2006: 56)
El estado del arte que es el arranque de cualquier tesis de grado o de postgrado, se convierte en un amplio sentido la plataforma de lanzamiento de cualquier inquietud intelectual y artística. Se necesita conocer el estado de la ciencia, los procedimientos que se ha adquirido y los recursos fundamentales para poder avanzar por una senda inexplorada pero segura. Es verdad que frecuentemente la ciencia nos lleva a perder el tiempo en lo que nos proponemos investigar y resolver porque nos regala un oasis o un paraíso ignorado… pero frecuentemente quien busca mal, solamente pierde el tiempo.
“Cuando los grandes matemáticos procuran resolver grandes problemas en cuando nacen las grandes matemáticas, los así llamados “lugares intermedios”, aunque los problemas iniciales sigan sin resolver. Para darte un ejemplo: el campo de la teoría de series finitas proviene de los intentos de Evariste Galois de resolver la ecuación de quinto grado en su forma general.” (DOXIADIS, 2006: 45)
Es curioso observar como a las APTITUDES PERSONALES – que tienen un mayor desarrollo si hay una buena alimentación y cuidado en los primeros años - se le debe sumar los conocimientos instrumentales y formales que acompañan ese crecimiento.
Para iniciarse en matemáticas, filosofia, literatura, arte, ciencias… no basta la predisposición o la inclinación o la vocación o el interés… sino que se necesitan también el desarrollo de las condiciones psicofísicas iniciales, y la incorporación de los conocimientos previos de cada una de las áreas del saber para no volver a descubrir lo que ya se ha descubierto, para no perder el tiempo con procedimientos que no conducen a ninguna parte, para no ignorar la manera de recorrer el camino de una forma productiva y eficiente.
No todo puede ser intuición, interés, creación: se necesita conocimientos, manejo de los procedimientos, reconocimiento de los que han estado antes que uno. No se trata de repetirlos, de venerarlos tanto que finalmente no nos atrevemos a nada… pero sí se respetar sus aportes para poder continuar el camino. En todas las producciones somos eslabones de una cadena que no comienza con nosotros ni terminará con nosotros: si no lo reconocemos nos exponemos a inventar, diseñar, construir, sostener la cadena… con la posibilidad de que esa cadena tenga un solo eslabón y desaparezca con nosotros…
“Antes de que puedas embarcarte en una investigación original productiva necesitas adquirir un arsenal poderoso. Tendrás que dominar a la perfección todas las herramientas matemáticas del análisis, el análisis complejo, la topología y el álgebra. Incluso un joven con las prodigiosas aptitudes como Petros necesitaba tiempo y dedicación absoluta para adquirir la maestría” (DOXIADIS, 2006: 56)
El estado del arte que es el arranque de cualquier tesis de grado o de postgrado, se convierte en un amplio sentido la plataforma de lanzamiento de cualquier inquietud intelectual y artística. Se necesita conocer el estado de la ciencia, los procedimientos que se ha adquirido y los recursos fundamentales para poder avanzar por una senda inexplorada pero segura. Es verdad que frecuentemente la ciencia nos lleva a perder el tiempo en lo que nos proponemos investigar y resolver porque nos regala un oasis o un paraíso ignorado… pero frecuentemente quien busca mal, solamente pierde el tiempo.
“Cuando los grandes matemáticos procuran resolver grandes problemas en cuando nacen las grandes matemáticas, los así llamados “lugares intermedios”, aunque los problemas iniciales sigan sin resolver. Para darte un ejemplo: el campo de la teoría de series finitas proviene de los intentos de Evariste Galois de resolver la ecuación de quinto grado en su forma general.” (DOXIADIS, 2006: 45)
